Los hoteles suponen un lugar de descanso y relajación para quien los visita. Sin embargo, hay ciertos lugares donde la tranquilidad se deja de lado y comienzan a ocurrir fenómenos extraños que desafían toda explicación lógica. Uno de estos lugares es el hotel Stanley, ubicado en Colorado, Estados Unidos. En este artículo, te llevaremos a través de la historia detrás de uno de los hoteles más misteriosos del mundo y de los eventos que lo han vuelto tan famoso.
El hotel Stanley fue construido en 1907 por el inventor y empresario F.O. Stanley, quien pretendía utilizar el lugar como un destino de vacaciones para aquellos que querían escapar del ajetreado ritmo de vida en la ciudad. La idea era crear un lugar donde las personas pudieran disfrutar de la naturaleza y del aire fresco de las montañas rocosas. Para este fin, construyó el hotel con todas las comodidades necesarias para que los invitados se sintieran cómodos.
El hotel Stanley pronto se convirtió en un lugar popular para los turistas de todo el mundo. La propiedad pasó por varias manos hasta que llegó a manos del empresario John W. Cullen en 1983. Él fue quien logró convertirlo en uno de los hoteles más famosos de todo el mundo debido a los sucesos paranormales que tuvieron lugar en el establecimiento.
Es cierto que el hotel Stanley fue la fuente de inspiración de Stephen King para su novela "The Shinning" (El resplandor), que se convirtió en una de sus obras más exitosas. Y aunque en la novela, el hotel se llama Overlook, King se inspiró en gran parte en el hotel Stanley, donde se alojó junto con su esposa durante una noche en septiembre de 1974.
Los dos llegaron al hotel cuando éste aún estaba cerrado por temporada, y no había más alojados en el hotel. King se sintió intrigado por el lugar y comenzó a imaginar los sucesos que podrían tener lugar en un lugar como ese. King se alojó en la habitación 217, una habitación que él describió como "increíblemente aterradora". La habitación 217 es una de las más populares del hotel, y se ha convertido en un destino popular para aquellos que buscan experimentar fenómenos sobrenaturales.
La leyenda dice que, en los años treinta, una de las camareras del hotel, de nombre Elizabeth, fue enviado a la habitación 217 para encender las luces. Al entrar, no se percató de que había una vela encendida, oculta en un rincón de la habitación. La camarera sufrió graves quemaduras, pero logró sobrevivir. Desde entonces, se dice que su fantasma aún habita la habitación 217.
El esposo de la camarera murió poco después de la tragedia, y se dice que su fantasma también ronda por los pasillos del hotel. En la actualidad, los huéspedes del hotel informan de objetos que se mueven solos, de cajones que se abren y se cierran, y ruidos extraños provenientes de la habitación 217.
Otro lugar popular para aquellos que buscan experimentar fenómenos paranormales es el formal comedor del hotel. Se dice que las mesas y las sillas se mueven solas, y que en ocasiones, se puede ver a un fantasma en la habitación. Hay otro fantasma que se dice que acecha la sala de música, que está justo al lado.
En la sala de música, se dice que los huéspedes escuchan música que proviene de la nada, el piano toca solo y se pueden apreciar sombras que aparecen y desaparecen.
Otro de los fantasmas que se dice que ronda por el hotel es el del conserje original, quien murió poco después de retirarse. Su figura ha sido vista por la gente en los pasillos del hotel, y se puede escuchar el sonido de sus llaves balanceándose mientras camina.
El hotel Stanley es uno de esos lugares que debe ser visitado por cualquiera que tenga una inclinación hacia los sucesos sobrenaturales. Desde las sombras que se deslizan en los pasillos hasta el piano que toca las notas sin que nadie lo toque, el hotel Stanley es un lugar que nunca deja de sorprender. Independientemente de si crees en los fantasmas o no, no hay duda de que este hotel es un hito en la historia de los misterios paranormales y vale la pena visitar.